Amarilis Cortina Rey
Managua, La Habana, 16 de junio de 2011, (PD) Muchos son los comentarios desfavorables entre la población sobre los medios oficiales. La realidad es que el gran control sobre la información que ejerce el gobierno desde hace más de medio siglo, ha servido para crear una prensa virtual que nada tiene que ver con lo que se vive.
Las críticas hechas a los periodistas por parte de la alta dirigencia del gobierno acerca de que debían ser más profesionales y dejar a un lado el triunfalismo, llegan en un momento tardío. Tantos años escribiendo solo lo que se puede, invalida la libre creación y la libertad de expresarse.
Este primero de junio fue celebrado el Día Internacional de la Infancia. La prensa nacional cubrió esa fecha mencionando las múltiples actividades que ese día tuvieron los niños en toda la isla. Sin embargo, existen muchos niños que son marginados por la forma de pensar de sus padres, sea política o religiosa.
Jessica Benítez, de 9 años, está sin su tarjeta de menor, desde su primer año de vida. La policía política se la retiró junto a la identidad de su madre Bárbara Lorenzo, cuando con la pequeña en brazos, trataba de salir el país por sus propios medios.
Esa situación de ilegalidad permanente, les ha traído muchos trastornos sobre todo a la niña, que no ha podido recibir el tratamiento médico que requiere debido a la falta de su tarjeta de identidad.
Por ese mismo motivo, asegura su madre, Jessica, que ahora cursa el cuarto grado, no es matricula oficial del centro escolar al que asiste en el poblado de Managua, en Arroyo Naranjo, donde residen.
"Pero eso aquí no lo ponen en ningún periódico ni puedo quejarme en ningún lugar, porque la gente tiene mucho miedo. Cuando le dices que en medio de todo esto está la mano de la Seguridad del Estado, entonces te dan evasivas, nadie quiere comprometerse. Incluso no encuentro ni trabajo por esa causa, lo que lleva a mi hija a una vida de privaciones constantes. Si dentro de dos o tres años el problema no se resuelve, no sé cómo voy a inscribir a mi hija para que pueda comprar almohadillas sanitarias. La niña no va tener ni eso. Y todo porque siempre he querido irme de este país," señaló Bárbara Lorenzo.
El pasado 31 de mayo, el rotativo Juventud Rebelde publicó una información sobre la detención de un niño palestino de siete años, que según el diario israelí Haaretz, había sido acusado de tirar piedras. El niño fue devuelto a su madre cuatro horas después, cuando lo encontró en un vehículo policial.
Pero no habría que ir tan lejos. Hace solo unos días, en el reparto Frank País, del municipio Arroyo Naranjo, un niño de 15 años fue detenido por la policía, porque presuntamente iba a cometer un delito. Fue esposado y le rociaron sus ojos con gas pimienta. Arrestado durante varias horas, lo mantuvieron en la estación policial con las esposas puestas y con sus manos en alto para que confesara su presunto delito.
Aunque esta noticia tiene más inmediatez que la del niño palestino, en Cuba no se publica. Es preferible mirar la viga en el ojo ajeno. Así es la prensa del gobierno. Y la vida de muchos, agria como el más agrio vino.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario