domingo, 14 de enero de 2024

DE NUEVO LOS “PUENTEROS” DE CARLOS LAZO

Mario J, Viera



Convocar marchas y caravanas de reclamos dentro de una democracia no conlleva contratiempos, acosos policiales o cargas violentas contra los participantes; no hay peligro de que sean encarcelados, sometidos a juicios parcializados que les condenen a largos años de prisión bajo la acusación de sedición. En Cuba, su pueblo no puede, o al menos se le tiene prohibido manifestarse públicamente en reclamos al gobierno.

Carlos Lazo, el “gran activista” a favor de los interese de la dictadura pececista hace un llamamiento a cualquier cubano, dondequiera que esté, a cualquier persona amante de la paz y que sienta como suyo el sufrimiento del pueblo de la isla, “sometido al cruel e inhumano bloqueo”, un “bloqueo” que le permite al régimen de La Habana surtirse de sal, de arroz, de carne de pollo y de muchos otros importantes ítems de la canasta familiar.

Las sanciones económicas unilaterales impuestas por Estados Unidos contra la casta política de Cuba, quizá pueda causar algún daño reflejo dentro del pueblo cubano. Sí, puede ser. Buscar empatía hacia el sufrimiento del pueblo de la isla, es un acto digno. Si todos se unieran en una marcha o en una caravana sintiendo como suyo el sufrimiento de un pueblo sometido, no a embargos comerciales, sino al cruel e inhumano poder de una dictadura, como la que en Cuba rige bajo los designios del Partido Comunista de Cuba, esto sí sería el acto más digno para conmemorar el 171 natalicio de José Martí. Tomar el nombre de José Martí en defensa de la mentira, en defensa de una tiranía, es una ofensa al gran mentor e indigno de llamarse cubano.

Propone Lazo con aurea de liderazgo: “Salga a la calle, saque una bandera, envíe un mensaje en redes sociales, haga sentir su voz”, no en Cuba, ¡Dios le libre!, en Estados Unidos, y no a favor de la libertad en Cuba, sino a favor de la dictadura comunista.

Y cita el puentero mayor una frase de apóstol de nuestras libertades: “"los hombres van en dos bandos: los que aman y fundan, los que odian y deshacen", y se atreve Lazo a decir que “nosotros, los puenteros, somos del primer grupo”. Dicho así, simplemente es totalmente falso asumir para sí una categoría como “los que aman y funden”. Los falsarios, los hipócritas, los demagogos, los que sirven de puentes para darle calzada ancha a una dictadura jamás pueden ser considerados como los que aman y fundan.   

miércoles, 3 de enero de 2024

ARGENTINA EN EL SENDERO HACIA EL DESCALABRO SOCIAL

Mario J. Viera

 


Como han señalado Rebeca Rodríguez Minor y Christian Reich López: “La impactante crisis económica que vivió Argentina en 2001 fue la dolorosa consecuencia de gobiernos ultraneoliberales, que se dedicaron a privatizar la nación y manipular el valor monetario interno en su juego paritario con el dólar estadunidense, lo cual finalmente los llevó a un callejón sin salida” para agregar que todavía, la lección no fue aprendida.

Primero fue Carlos Menen quien recurriera al neoliberalismo económico que culminó en la crisis del 2001, ya durante el gobierno de Fernando de la Rúa. El experimento neoliberal de Carlos dejó tras de sí un déficit fiscal de 7350 millones de pesos en 1999; luego llegó Mauricio Macri. El gobierno de Macri, tal como lo consideran Sergio Morresi y Martín Vicente, “se sumió en una cerrazón con tintes doctrinarios y antipluralistas, que mixturó una identidad antiperonista clásica con un neoliberalismo remozado sin reparos para flirtear con propuestas autoritarias”.

Ahora, en Argentina se intenta por tercera vez la aventura del neoliberalismo bajo la conducción del anarcoloco de Javier Milei, quien ha podido ascender a la presidencia por el apoyo que a su campaña le prestaron las fuerzas electorales del fracasado Mauricio Macri y del cambio de Patricia Bullrich la cual tras quedar colocada en un triste tercer lugar buscó asilo dentro de las líneas de Milei hasta ser nombrada por el libertario como Ministra de Seguridad de La Libertad Avanza; cargo similar al ocupado por ella en el gobierno de Macri en 2016.

Durante su campaña electoral del 2023 acusaba a Milei de ser “el fraude más grande que puede haber en política” y de poseer “ideas malas y peligrosas”, ahora apoya todas esas ideas y pone en práctica las mismas decisiones que tomaba cuando formó parte del gobierno de Macri, de represión a toda manifestación de protestas, aunque solo sea expresadas públicamente por tres personas. En 2019 la Coordinadora Contra la Represión Policial e Institucional o CORREPI presentó un informe preliminar denunciando que en 1110 días del gobierno de Mauricio Macri el aparato represivo estatal mató 1.206 personas, siendo el más fuerte incremento de la represión estatal desde 1983, con un promedio de más de 400 asesinatos estatales al año en el marco de sus diferentes modalidades, entre ellas gatillo fácil ─ por el cual de habilita a las fuerzas represivas hacer uso de armas de fuego ante un supuesto "peligro inminente" ─, muertes en lugares de detención, desaparición forzada, represión a la protesta o conflictos sociales. ¿Serán olvidadizos los argentinos? ¿Acaso estas medidas represivas son diferentes a las practicadas por las dictaduras de Cuba y de Nicaragua?

Javier Milei fue electo democráticamente, sin que la “casta” hubiera hecho algo para impedirlo, como también lo fuera Hugo Chávez en Venezuela en las elecciones de 1998; como también lo fue Daniel Ortega en Nicaragua en las elecciones del 2006. Pero ser electo democráticamente no garantiza que el electo emprenda un gobierno democrático. Así, no es de extrañar que el heredero de Hugo Chávez al trono de Venezuela lance sus más enconados dardos contra su similar argentino de signo contrario y lo acuse de pretender destruir el Estado y de querer “convertir a Argentina en colonia del capital extranjero y en un feudo de los cuatro o cinco multimillonarios que le financiaron la campaña”. Es el choque de los extremos políticos, el choque entre la ultraizquierda y la ultraderecha. Las dictaduras de izquierda se unen en contra del poder dictatorial que se adivina bajo el Decreto de Necesidad y Urgencia por el cual Milei pide se le conceda facultades extraordinarias para gobernar mediante decretos, lo mismo que hacen Maduro y Ortega, gobernar por decretos. Lo mismo que pone en práctica en Rusia Vladimir Putin. Es el decir de un antiguo funcionario del gobierno de Carlos Menen, la necesidad de un “presidente fuerte y enérgico”: “Es lo que la Argentina necesita después de haber pasado prácticamente cuatro años sin presidente ─ así lo declaró el exministro de Justicia del gobierno de Menen y actual procurador del Tesoro de la Nación, Rodolfo Barra ─    Necesita un presidente fuerte y enérgico, porque los presidentes débiles fracasaron en nuestra historia”.

Ahora el presidente libertario intenta combatir la inflación liberando el precio de la gasolina que ahora alcanzó un aumento del 27% acumulando un alza del 84% que existía al inicio de su gobierno, pero este es el resultado de la elección entre lo malo y lo peor. Sí, así lo había entrevisto el candidato del peronismo Sergio Massa: “Escucho al otro candidato (Milei) decir que la solución era liberar precios. Ahí aparecen los dos modelos de país. Con la liberación de precios que propone Milei, la nafta valdría 800 pesos, hoy está $320. Tienen que saber quién paga el costo. En definitiva, nosotros tenemos la suerte de ser un país que tiene la cuarta reserva mundial de petróleo, y obviamente que tenemos que incrementar las exportaciones, pero tenemos que lograr que los argentinos accedan a combustible barato porque eso hace competitiva nuestra industria, nuestra logística, el valor del precio del taxi, del colectivo y también el valor del precio de la verdulería cuando el verdulero va al mercado central a comprar mercadería. No se puede plantear de un día para el otro llevar la nafta de 320 a 800 pesos porque eso es destruir la economía del bolsillo de los argentinos”.

Jorge D’Onofrio, ministro de Transporte de la provincia de Buenos Aires. Lo expresó tajantemente: “La libertad que profesa Milei es la libertad de los poderosos”. Esa es la Libertad que profesan todos los seguidores de las doctrinas neoliberales, desde la Escuela de Chicago hasta la austríaca. Es por eso que Donald Trump y Bolsonaro se entusiasman con el triunfo de Milei, como el eje del expansionismo de la ultraderecha en el continente.

Así con las delirantes propuestas de Milei, Argentina está en el sendero hacia el descalabro social; lo único positivo que pueda arrojar su llegada al poder es que, quizá luego de él, el peronismo deje de ser la fuerza política dominante en Argentina.

La Economía (con mayúscula) forma parte de las ciencias sociales y, aunque hace uso de cálculos y fórmulas matemáticas, como toda ciencia social, no es exacta. Esto es un hecho demostrado por todas las crisis económicas que de tiempo en tiempo sacuden las sociedades de mercado y con la crisis general del sistema comunista. Para los marxistas, el control de los medios fundamentales de producción y la ejecución del proceso productivo mediante la planificación centralizada es una verdad indiscutible; para los partidarios del liberalismo económico el motor principal de todo el desarrollo social está depositado en las leyes del mercado y en la limitación del intervencionismo estatal; para los propugnadores del neoliberalismo es el mercado el que debe supervisar al Estado y no al revés. Todos los conocimientos y todas las teorías económicas deben ser tomados de manera pragmática y nunca concebirse como dogmas infalibles, propios de toda ideología..