He salido del aire durante unos pocos días, pues mi alter ego se estuvo mudando.
Cambiamos nuestro tranquilo pueblito floridano por otro pueblito floridano aun más pequeño que el anterior.
¡Ah, como han ocurrido sucesos desde entonces!
Ernesto Sabato
El pasado sábado falleció el escritor argentino Ernesto Sabato, autor de Sobre héroes y tumbas y El Túnel. Murio cuando solo le faltaban dos meses para cumplir los 100 años y sin poder disfrutar el premio Nobel.
Este domingo se decidió la beatificación de Juan Pablo II (Karol Wojtyla), seis años y 29 días después de su fallecimiento.
El viernes se celebró por todo lo alto la boda del príncipe Guillermo (William) el nieto de Isabel II, el hijo de la princesa Diana. No quedó nadie en todo el mundo que disfrutara el espectáculo de cuento de hadas; bueno, tal vez en Cuba se hizo, si acaso un comentario.
El día 27 de abril se desató la furia de la naturaleza sobre los estados del Sur Este de los Estados Unidos, En Alabama los tornados dejaron destrucción y 300 muertos. En un poblado de Georgia, el hijo de mi alter ego estuvo a punto de perder la vida. Se salvó porque se echó sobre el piso asumiendo una posición fetal y los escombros de la casa calleron sobre el sofá junto al cual se había acostado. Estuvo atrapado por varias horas y salió con vida, con algunos magullones y golpes.
En Libia, la OTAN bombardeó la residencia del dépota el Gadafi, salvandose por un pelo pero su hijo menor Saif al Arab Gadafi, pereció en el bombardeo junto a tres pequeños hijos suyos.
En Cuba los sombis del Comité Central del Partido Comunista hicieron desfilar al pueblo reclutado para conmemorar el 1 de mayo y presentar el desfile como un respaldo a la basura del VI Congreso y como si reclamara la multitud desfilante la liberación de los cinco sicarios de la Seguridad del Estado, presos en Estados Unidos por labor de espionaje.
Ahora, el Fantasma continuará vagando sin interrupciones.
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