Desgaste de Correa. Ecuador polarizado.

Mario J. Viera

Se empeñó a fondo Correa  en la defensa de su consulta popular. Intentaba ganar apabullantemente su propuesta por el sí a las diez tesis que había llevado a referendo. Un triunfo indiscutible a sus propuestas significaría un espaldarazo popular a su gestión al frente del gobierno de Ecuador.

Saltó delirante de alegría cuando se anunció el burdo “exit poll” supuestamente tomado a boca de urna que aseguraba una victoria del Sí sobre el No con superioridad de 7 a 1. Gran chasco. Desde su olímpico poder rugió y lanzó rayos como furioso Zeus. Los resultados que se iban anunciando de poco a poco por el CNE mostraban que no era tan estrepitosa la victoria del Sí y en algunos casos el Sí y el No mostraban un empate técnico, algo que molesta decididamente a Correa, que le choca esa expresión de empate.

Los resultados que se están dando a conocer no muestran el supuesto espaldarazo al inmenso Rafael Correa, independiente de que el Sí se imponga en el conteo final de los votos por pocos puntos porcentuales o fracción. El Sí no ha obtenido una mayoría sobre la suma de los votos en blanco, nulos y a favor del No. “Los resultados ─ señala el ex miembro del oficialista Alianza País, Alberto Acosta ─ muestran que la mayoría de electores no está con el Gobierno”.

El Sí no ha alcanzado ni siquiera el imprescindible mínimo del 50 más uno por ciento de los votos válidos. La estrella del prepotente Correa comienza a perder luminosidad. Ecuador se ha polarizado, esa es la incuestionable verdad de los resultados de la consulta popular.

Ya con el escrutinio del 47.60 por ciento de los votos, la pregunta 4 que pretende un control de la justicia por intermedio de un organismo que se encargaría de reestructurar el sistema judicial y la pregunta 9 que amenaza con el control de un consejo de regulación para los medios de comunicación mantienen una tendencia, aunque mínima a favor del No.

Por otra parte el presidente del Consejo Nacional Electoral, Omar Simon aseguró que no se podía decir que hay un ganador cuando todavía no ha concluido el proceso de escrutinio. El funcionario del CNE declaró además “Aquí no hay ni empates técnicos ni tendencias, sencillamente tenemos que esperar todos frente a las 10 preguntas, más aún si es que hay márgenes estrechos como hay en varias de las preguntas”.

Aunque el Sí gane finalmente, el resultado subliminal es una aplastante derrota de Correa. Comienza su declinar. Ecuador, su pueblo comienza a despertar del hechizo del populismo mal denominado bolivariano. Si el Sí triunfa con escaso margen, Correa se verá en la necesidad de ser muy cauteloso a la hora de imponer el control sobre el Poder Judicial y amordazar a la prensa, de lo contrario deberá esperar una contundente respuesta de rechazo por todo ese electorado que le ha dicho No y representa, en realidad más del 50 por ciento del país.