jueves, 23 de diciembre de 2010

SIGUEN LOS WIKI LEAKS


Cuba no oyó reclamo de Brasil sobre presos

Por JUAN CARLOS CHAVEZ




El gobierno brasileño calificó el caso de Cuba como un "asunto difícil" de abordar y aceptó que las autoridades de la isla no fueron receptivas a las peticiones hechas por Brasilia sobre el mejoramiento de las condiciones de los presos políticos, según un despacho de WikiLeaks, publicado el miércoles por el diario El País.
El ex ministro de la presidencia de Brasil, José Dirceu y Otto Reich, ex subsecretario de asuntos hemisféricos de EEUU, analizaron el tema en privado

El cable, fechado en marzo del 2004, registra las conclusiones de un encuentro privado de 90 minutos entre el ex subsecretario de asuntos hemisféricos del Departamento de Estado, Otto Reich, y el ex ministro de la presidencia de Brasil, José Dirceu.

Los mensajes filtrados por WikiLeaks destacan la disponibilidad de Dirceu de analizar personalmente con el mandatario Luiz Inácio Lula da Silva y otras altas autoridades de su gobierno la posibilidad de acoger a familiares de opositores cubanos.

"Consultado sobre si el gobierno de Lula consideraría recibir a las madres de los disidentes cubanos presos como un gesto de interés, Dirceu respondió que él discutiría esa idea con otros miembros del GOB [Gobierno de Brasil], incluido el presidente".

Sin embargo, una anotación al documento original indica que el tema nunca llegó a tratarse. Según el despacho, Dirceu también agregó que Cuba es "un asunto muy difícil para él en lo personal".

Detenido en 1968 durante un congreso estudiantil, Dirceu fue uno de los 14 presos que el régimen militar brasileño dejó en libertad un año después a cambio del embajador estadounidense Charles Elbrick, secuestrado por la guerrilla comunista que entonces operaba en Brasil. Se refugió en Cuba, donde recibió entrenamiento guerrillero.

Dirceu, entonces ministro de la Presidencia, era considerado como la mano derecha de Lula antes de que fuera obligado a renunciar al cargo en medio de un escándalo a mediados de la década del 2000.

El cable diplomático estadounidense en Sao Paulo informó que Dirceu dijo que el nuevo embajador cubano en Brasilia "se negó a sostener cualquier discusión sobre este tema [el tratamiento de los presos], incluso en relación con el ciudadano brasileño que fue arrestado en Cuba por complicidad en tráfico de personas".

Adelantó que Brasil se abstendría en la Comisión de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) "como había hecho en años anteriores" sobre una resolución que criticaba el balance de Cuba en ese terreno .

Otro cable del 2005 enviado al Departamento de Estado por el embajador estadounidense en Brasilia, John Danilovich, señala que Dirceu opina que, a pesar de las excelentes relaciones entre Fidel Castro y Hugo Chávez, la crispación regional provocada por las declaraciones del presidente venezolano no eran un tema de interés para La Habana.

"Contrariamente, los problemas internos de Cuba son tan profundos y su economía tan frágil que el régimen de Castro necesita desesperadamente un ambiente regional calmado para trabajar en la solución de sus problemas y atraer inversión extranjera", señaló el cable. "El [Dirceu] reiteró lo que dijo en sus reuniones de Washington, en el sentido de que si el Gobierno de Estados Unidos permitiera el comercio y los contactos privados con Cuba, la isla caribeña sería irreconocible en cinco años".


______________________________________________-
De lo que no queda dudas es que el presidente del Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva ha sido un cómplice incondicional del régimen de los Castro. Recuérdes su sonrisa despectiva cuando Raúl Castro informaba la muerte "de un preso" (Orlando Zapata Tamayo) y luego su declaración comparando a los presos de conciencia cubanos con los delincuentes comunes de Brasil.

Lula da Silva es un verdadero camaján. A su gobierno nunca le interesó la suerte de los presos cubano; de los único que se declaró benefactor fue de los cinco sicarios terroristas presos en Estados Unidos por actividades de espionaje.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario