domingo, 14 de mayo de 2023

EN UN DIA, COMO EL DE HOY

 

Mario J. Viera

 


En un día, como este segundo domingo de mayo, pienso en Cuba; y tengo que pensar en todas esas madres, que allá en la isla siempre querida, siempre presente en mis pensamientos, viven en medio de esa atmósfera social asfixiante que es hoy la triste realidad que se vive en Cuba.

Pienso en todos los sinsabores que son el día a día de esas madres. ¿Desearles felicidades? Sí, por su condición de madres; por su constante cuidado y amor que sienten por sus hijos, por su batallar diario para lograr llevar algún alimento para sus hijos, en medio de todas las escaseces, de todo el desabastecimiento alimentario que se padece.

¿Qué felicidad pueden tener esas madres cubanas que tienen algún hijo en prisión, por el único delito de defender su propia dignidad, por oponerse a un régimen de terror, presente siempre en Cuba? En medio de esa tristeza que una madre siente viendo a sus hijos tras las rejas de una prisión, la única felicidad que pudieran sentir es saber que los criaron con valores. ¿Cómo consolar la tristeza de una madre sabiendo que su hijo está injustamente puesto en prisión?

¿Qué felicidad tiene aquella madre que sabe que un hijo suyo desapareció entre las olas encrespadas del Estrecho de la Florida, en empeño frustrado de encontrar la libertad en otras tierras?

¡Honor, honra, solo me atrevo a rendirles, en un día como el de hoy, a todas las madres cubanas! Para todas las madres que viven en Cuba, que sufren en medio de una cruel dictadura, solo puedo decirles, como José Martí, le dijera un día a su madre, “piensa que nacen entre espinas flores”.

Para todas las madres que viven en Cuba, vaya un ramo de rosas blancas, de esas que entre espinas nacen.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario