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jueves, 24 de marzo de 2011

Comunistas: Comisión de estacas.

Mario J. Viera.


Palacio de los leones. Táchira

Sí, era costumbre de los comunistas en Cuba organizar los llamado “comités de estaca” para apalear a los que no comulgaban con sus propuestas. Estos comités fueron muy activos durante la revolución del 33, y cuando su intento de fundar soviets en algunos centrales a la caída de la dictadura de Gerardo Machado. En 1959 intentaron también organizar sus comités de estacas, pero tropezaron con un matón más fuerte que se les impuso y terminaron como dóciles corderitos balando loas al nuevo dictador.
Ahora reeditan esos comités de fuerza con los destacamentos de “respuesta rápida” para acosar, ofender y hasta golpear a los opositores al castrismo. Siempre el mismo matonismo, pero a la sombra del poder o del número. De igual a igual todos son una banda de ratones asustadizos.
En Venezuela ocurre lo mismo. Existen numerosos grupos de matones al servicio de Chávez y, por supuesto, amparados por él. Se aparecen armados en cualquier lugar y agreden desde las sombras a sus oponentes o a plena luz cuando en grupos y armados pretenden acallar las voces libres.

Ahora mismo, un grupo de supuestos estudiantes universitarios, asaltaron el Palacio de los Leones, sede del Poder Legislativo del montañoso Estado de Táchira, con la intención de silenciar a los estudiantes democráticos que pretendían hacer que su voz y sus reclamos se escucharan en la legislatura estatal.
El diario Nacional de Caracas informó que el grupo de matones, asaltó el Palacio de los Leones y “secuestraron a diez estudiantes y diputados que debatían las cinco propuestas que realizan los estudiantes del movimiento estudiantil”. 
De acuerdo con el rotativo caraqueño, los estudiantes de la Universidad Nacional Experimental del Táchira (UNET) y la Universidad Pedagógica Experimental Libertador (UPEL) exigían al Consejo Legislativo “que fungiera de intermediario ante el ministerio de Educación Universitaria para que atiendan las peticiones del movimiento estudiantil”.
Fue en ese instante que entraron grupos de furiosos chavistas en el local. Según Ernesto Márquez, director del servicio de llamadas de emergencias 171, los “estudiantes afectos al oficialismo mostraron armas de fuego” y agregó: "Han causado destrozos en las instalaciones, han roto ventanas, columnas, mesas y sillas". La furia de los matones se volcó también sobre los tres autobuses de la UNET.
Por su parte, EL UNIVERSAL, reportó que la agresión se produjo cuando “Wilmer Zabaleta, presidente del Centro de Estudiantes de la UNET realizaba su exposición de motivos ante los parlamentarios”. La sala de sesiones se convirtió en un campo de batalla donde se quebraron vidrios, se rompieron sillas que luego se utilizaron como armas ofensivas y defensivas.
EL UNIVERSAL recoge la declaración del diputado Daniel Ceballos: "Estuvimos dos días esperando que el tema universitario se metiera en agenda, pasamos gran parte de la mañana exigiendo que no sacaran el tema de la discusión y finalmente, luego de una larga espera ingresaron diferente estudiantes, profesores, personal administrativo y obrero de la ULA, Unet, Upel a la sesión".
"Fue una provocación innecesaria. La sesión transcurrió normal sin gritos, insultos, cada persona exponía sus argumentos y, de repente, a empujones y gritos, ingresó este grupo de estudiantes chavistas a sabotear la actividad que desencadenó una trifulca"
Esa es la manera de actuar de los comunistas, llámense chavistas o castristas. Son la imagen especular de las tropas de choque de las SS hitlerianas. Si no convencen intentar vencer recurriendo a la fuerza bruta, incivilizada, totalitaria.

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